Exaltación del nombre
Un momento de transformación inacabado es eterno
La contemplación se conquista desde un corazón ciego
Un loro se esconde entre los pilares del salón
El dueño de las iniciativas lleva el ritmo y compás
Ciudad poblada de colinas y arenas
Ciudad blanca de armas y olivas
Pueblos unidos por la memoria primordial
Para un árbol suficientemente sostenedor
Cobijo de historias que no cesan su construcción.
Cobijo de historias que no cesan su construcción.
Hermosa descripción querido paulo, me gusta mucho donde señalas lo del cobijo de las historias ,nos mantienen en movimiento y a otros nos dan sustento y alegría al alma .
ResponderEliminarGracias Marite, sin duda los árboles son nuestra sombra y en el nos desplegamos. La sabiduría dice que debemos agradecer por el que tenemos.
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